Lectores y escritores

En este apartado el protagonista es el lector y sus creaciones, EL LECTOR ESCRITOR, en su sentido más amplio; es decir, no sólo el lector de mis libros sino todo aquel que quiera enriquecer este rincón literario con sus textos. Envíalos a la dirección:

miguelangelguelmi.escribe.narramos14@blogger.com



En el "asunto" de tu correo escribe el título de tu composición, tu nombre y, si lo deseas, tu lugar de residencia. Ejemplo:





La luz en la niebla. Pedro Márquez. Gran Canaria.



Por último, escribe o pega el texto en el cuerpo del mensaje.



¡Y RECUERDA! Cuida la ortografía y los signos de puntuación.



¡BIENVENIDOS!

Bajo la luz de una vela. Ylenia Moreno Suárez

Bajo la luz de una vela.

 

Habíamos estado soñando con aquel día toda la vida... cada uno tenía diferentes expectativas, cómo empezar o de qué hablar.

Aún recuerdo cómo comenzó la conversación... aquel ''Hola ¿cómo estás?... yo muy bien, ¿tú qué tal?''

Tan simple, pero a la vez tan especial.

Nos levantamos y empezamos a bailar, daba igual la canción que fuera, daba igual...

Luego recuerdo también que nos volvimos a sentar y comenzamos a cenar... ninguno de los dos fue capaz de hablar, de interrumpir aquel incómodo silencio, aunque tan bien es cierto que con mirarnos ya estábamos sonriéndonos.

La noche pasó entre copas, bailes y sonrisas... la perfecta sintonía.

Después de entre comillas cenar, y lo de entre comillas lo digo porque más que comer lo que hacíamos era mirarnos y sonreír, yo tímida y tú nervioso conseguimos dejar atrás la mesa y salir de allí.

Todavía recuerdo cómo caminamos de la mano por aquella preciosa avenida... hablamos de todo, de hasta lo que menos importaba.

Después de andar por todas y cada una de las calles más recónditas de la ciudad, recuerdo que decidimos detenernos en un parque lleno de árboles y flores... todavía guardo en un cajón aquella margarita que me diste diciéndome ''no dejaremos que se deshoje''... lo más bonito a continuación recuerdo que fue el roce de mis labios con los tuyos... lo más esperado e inesperado a la vez.

A día de hoy todavía seguimos yendo a aquel jardín y reír mientras nos acordamos de cómo pasó.

Todos los días especiales unas copas, una buena cena, una distinguida canción, unas sonrisas que no se pueden ocultar, unas bonitas flores, una noche a la luz de una vela, tú y yo... se hacen el mejor modo de vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario